Buenas noches, Gorila es un álbum bedtime divertido y muy bien confeccionado de la ilustradora norteamericana Peggy Rathmann (1953-).
Un guarda de zoológico va dando las buenas noches a los animales cuando hace su ronda. Pero el gorila le quita las llaves sin que se dé cuenta, le sigue y abre la jaula de los demás animales, que forman una fila detrás del guarda: gorila, elefante, jirafa, león, armadillo… El guarda entra en su casa y se acuesta, inconsciente de lo que viene detrás. Pero su mujer sí ve a los animales… y arregla un poco las cosas.
La historia tiene a su favor, primero, una excelente composición gráfica: por medio de unas ilustraciones graciosas, narrativas y bien secuenciadas, se da toda la información y el desarrollo de lo que ocurre. Luego, el texto es mínimo: sólo se repite varias veces «Buenas noches», expresión que va en globos al modo de los cómic. Tiene tirón con los chicos pequeños por su simpatía y por su carácter como de revelación de un mundo secreto a nuestras espaldas. Por eso se le puede dar un buen puesto dentro del minisubgénero de los relatos previos al momento de acostarse.